viernes, 11 de octubre de 2013

Tú eres una de ellas.

Que las palabras fluyan, salgan solas. Quiero que todo aquello que pienso quede plasmado en hojas de papel de todo tipo, de todos los colores, plasmar mis pensamientos del ahora. 

Tengo la suerte de tener a personas con un gran corazón, grandes amigos que se preocupan por mí, que me apoyan, me escuchan y aconseja. Tengo la suerte de haberlos encontrado en el momento justo, en el momento exacto, cuando menos me lo esperaba. 

Puedo pasarme horas hablando con ellos, contando historias y lo mejor de todo siempre con una sonrisa de oreja a oreja. Reímos, reímos y no paramos de reír. Llega un punto donde se nos saltan las lágrimas, donde con tan sólo una mirada ya empiezan las carcajadas. 

Amigos con las que cualquier excusa es buena para celebrar, para pasar un rato en buena compañía, hablando, disfrutando, desconectando. Personas únicas con las que sentarse a tomar un café, dos o tres y hablar, cotillear, reír o simplemente olvidar. Disfrutar de ese amargo café mientras escuchas batallitas, y a veces ni siquiera se puede disfrutar de él porque hay alguien que es capaz de hacerte reír e impedirte que te tomes el café. 

Cada persona ocupa su lugar en mi corazón, hay personas que en muy poco tiempo se han convertido mucho. He dedicado muchos posts a diferentes personas y este no puedo ser menos...

Recuerdo que al principio éramos simples conocidas que iban juntas a algunas clases y que cogían el mismo tren. Al principio las conversaciones eran repetitivas, iguales, similares... Pero poco a poco la amistad nació. ¡Y mira ahora! Incluso a Barcelona juntas (y solas) vamos. 

Grandes momentos hemos vivido. Y siempre predominan las alegrías, risas y sonrisas a lo largo de un año. Hemos llegado hasta tal punto que ahora con tan solo mirarnos nos reímos. Hemos vivido momentos de confidencias, de antojos y dudas existenciales. Momentos juntas, escuchándonos, apoyándonos. 

También es verdad que me haz hecho muchas veces cruz y raya. Pero, sin embargo sé que me sigues queriendo ¡ja! Eso no lo puedes negar. Aunque no te guste dar mucho cariño, yo sé que me quieres al igual que yo te quiero a ti. Los viajes en tren se hacen más amenos a tu lado, son diferentes, interesantes, llenos de felicidad. Y es que tú alegras a cualquiera. Sabes como hacerlo. Y nunca dejas de preocuparte. 

Gracias por estar ahí, por hacerme feliz y no sólo a mi sino a todos... (Al loo también. Lo siento debía decirlo.) Sigue siendo así. Haciéndome sonreír, haciendo que las horas de clase sean más amenas, más interesantes y llenas de vitalidad. Sigue así que yo siempre seguiré estando a tu lado. 

En fin, hay personas que son un tesoro muy valioso. Personas que te hacen la vida más llevadera. Personas que te escuchan, apoyan y aconsejan. Que te dicen la verdad y no aquello que tú quieres escuchar. Amistades verdaderas que no te juzgan, sino que te aceptan tal y como eres. Amigos que están contigo en las malas y en las buenas y no sólo cuando todo te va bien. Hay personas que te hacen feliz con tan sólo verlas. Personas diferentes, especiales, únicas. 

Y tú eres una de ellas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...