miércoles, 29 de agosto de 2012

¿Volver a la normalidad? La verdad, poco probable.

Perdón. Una palabra tan fácil pero tan difícil de pronunciar. Muy pocas personas son capaces de decirlo, de sentirlo verdaderamente. 

Quiero decir, hay gente que al pedir perdón lo dice de forma falsa, tan solo para acabar con la historia, para acabar con los problemas, diciéndolo como si no pasara nada, como si fuera lo más natural del mundo. ¡Pero cómo pueden ser así! Para pedir perdón hay que sentirlo verdaderamente, hay que estar mal, y entender porqué pides perdón, saber cual es el error que has cometido con la persona en cuestión, saber en que la has cagado para saber porqué decir "perdón". Y ese es el mayor problema de algunas personas, que no entienden el porqué, que no encuentran un porqué y entonces tan solo lo dicen... lo dicen para acabar y volver a la normalidad.   

Pero... ¿de verdad se piensan que volveremos a la normalidad? ¡No! No es tan sencillo... Si de verdad me han llegado a hacer daño, si verdaderamente es grave puedo perdonarlo... pero ¿olvidarlo? La verdad, poco probable. Creer que con tan solo pronunciar la palabra "perdón" volverán los besos y los abrazos como si nada, que volverán las confidencias, las llamadas y los momentos vividos... La verdad, poco probable. Pasar tiempo juntos, como antes, hablar durante horas como si nada hubiera pasado. La verdad, poco probable.   

Y quizás en ese momento nos daremos cuenta de que es algo que se ha terminado, algo por lo que no vale la pena luchar si verdaderamente te han hecho daño... Y en ese momento cada uno tomará caminos distintos. ¡Por qué sí! Porqué no se puede perdonar tan fácilmente. Y al final, cuando todo haya acabado, se dará cuenta de lo que ha perdido, de todo lo que ha tirado por la borda, tan solo por no sentir verdaderamente ese perdón... Porque ya lo dicen, "nadie sabe lo que tiene hasta que al final lo pierde". 

Y es ahí cuando dirá perdón verdaderamente, sintiéndolo de corazón. ¿Lo perdonaré? ¿Volveremos a la normalidad? La verdad, poco probable. 
  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...