sábado, 24 de mayo de 2014

Problemas de confianza.

Problemas; ¿se pueden solucionar? Algunos dicen que siempre, otros que nunca. ¿Yo? A veces.

La pequeña nota como autora de este blog dice: Una simple y mera soñadora que le gusta expresar aquello que quiere y desea en pequeños trozos de papel... Sin embargo, soy mucho más que eso. 

Tengo mis virtudes, eso seguro. Y sé que quienes están a mi lado son capaces de verlo, son capaces de valorarme y de ver aquello que yo no soy capaz de ver en mí. 

¿Soñadora? Sí. Todos tenemos sueños y yo también. Y sé que no son fáciles de cumplir, sé que nada estará a mi alcance fácilmente. No obstante, la falta de confianza en uno mismo es algo que no ayuda de ninguna manera. 

¿Por qué voy a mentir? ¿Por qué voy a fingir? ¿Me va a servir de algo? Soy una persona que nunca confía en sus propias posibilidades, alguien que no se valora lo suficiente, que no se quiere lo suficiente. Soy débil. Yo me veo así. 

Los demás no ven eso en mí, quizás no ven ni una cuarta parte de lo que soy, de como me siento. Es tan sencillo fingir una sonrisa, reírte de todo lo que pasa a tu alrededor. Es tan sencillo ayudar a los demás  a solucionar sus problemas. Es tan fácil... Son apariencias. 

Pero, en la soledad de mi habitación, cuando nadie me ve, cuando nadie me escucha, soy capaz de derrumbarme. Soy capaz de ver todos mis defectos, comentarlos y criticarlos y nunca mejorarlos. 

La falta de confianza hace mucho. Tener a tu lado a personas que con pequeños gestos te hacen desconfiar de tus posibilidades, del hecho de poder conseguir tus sueños. Gestos que hacen que mi propia confianza decaiga y eso provoca mi falta de valor, mi falta de cariño. 

Si tan solo me dijeras yo confío en ti. Nunca lo haces. Nunca lo he escuchado. Sé que intentas protegerme. Lo sé. Y por ello te quiero. Pero, tengo derecho a equivocarme ¿no? Quiero decir, debes confiar en mí, darme ese pequeño empujón, aunque después me equivoque. O tan solo decir que confías en mí. 

Me siento pequeña. Siento que nada de lo que hago vale la pena. Siento que no hago nada bien. Siento... siento tantas cosas. Y de tanto sentir, no hago más que llorar. Sé que las lágrimas no solucionan nada, sé que he de ser fuerte... Yo soy débil. 

¿Cómo solucionarlo? ¿Hay solución? Ojalá hubiera respuesta. Quizás la hay, quizás mis lágrimas acabarían si por una vez pronunciaras esas cuatro palabras; yo confío en ti. Quizás mis problemas de confianza se acaben, quizás te pueda creer. 

¿Me lo dirás alguna vez? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...