lunes, 17 de junio de 2013

¡Bendito karma!

Tú, sí tú. Tú quien me miras, y no haces más que mirarme. Tú quien te crees superior a mí, y sin embargo no haces más que mirarme con mala cara, y quizás con envidia. 

¿Envidia? Creo que sí. Pero, por una sencilla razón; he (y hemos) sido capaz de superar ese mal bache. Pusimos distancia, nos separamos y no hubo marcha atrás. 

Yo, a diferencia de ti y tus amiguitas, he sabido superarlo, he sabido seguir adelante con fuerza de voluntad y con grandes personas a mi alrededor. Personas que me han hecho comprender que tu comportamiento es un comportamiento infantil, de niña pequeña, aquella que no sabe lo que quiere. 

Hiciste demasiado daño, jugaste con los sentimientos de las personas que te queríamos, que te teníamos aprecio, y que te valorábamos tal y como eras. Pero, claro, te dejaste llevar por malas influencias y dejaste de lado a las personas que sí te consideraban amigas, para acercarte a aquellas que tan solo eran (y son) unas interesadas. 

Pues bien, yo ahora estoy la mar de bien. Lo he superado, he aprendido, he sido fuerte y he seguido adelante. Y tú, tú solo haces que mirarme mal, con desprecio, como si yo te hubiera hecho algo. Pero no te equivoques, quien se equivocó fuiste tú, quien hizo daño fuiste tú y no yo. 

Durante mucho tiempo aguanté las estupideces de personas como tú. Pero, hemos crecido y (en teoría) hemos madurado. Además, hemos aprendido, hemos entendido como son las cosas... Y la verdad, hay personas que no merecen estar a tu lado, que no merecen ni siquiera que les dediques un simple minuto de tu preciado tiempo. Y todo porque en un momento dado pues decidiste despreciarme y despreciar todo lo que yo hice por ti. 

Y ahora, ahora no haces más que mirarme. Mirarme y mirarme. Morirte de envidia porque te das cuenta que ahora eres tú quien no eres feliz, quien se está quedando sola. Y todo por los errores que cometiste, por todas las estupideces que dijiste e hiciste, todo eso te ha pasado factura. ¡Bendito karma!  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...