sábado, 27 de octubre de 2012

Tras una puñalada toca madurar.

Después de tantas puñaladas traperas, después de tantos plantones, me he dado cuenta de que hoy he de madurar.

Sí. Yo. Y no ellas. ¿Por qué? Sencillamente porque ellos, porque las personas que me han hecho daño no van a madurar. Pero yo sí puedo. He crecido como persona. Y tengo que apartar de mi lado a esas personas que no merecen la pena.

Pero, también hay otra duda: ¿por qué no van a madurar esas personas que tanto dolor han causado? Por el simple hecho de que siempre han tenido un comportamiento de niño pequeño, de personas malcriadas que se creen el centro del mundo. Y claro está, en el momento que se ven "amenazados", sacan sus uñas. Se defienden... Eso no está mal ¿verdad? Pero lo que si está mal es la forma de hacerlo, la forma de defenderse. Hacen daño. No piensan más que en si mismos.


Y es que es eso. Los demás no importamos, los demás no somos nadie... Para ellos somos simples moscas que revolotean por sus alrededores, que vamos sin rumbo fijo.


¡Qué gran equivocación! Son ellos los que no saben que hacer con su vida y por eso son ellos los que no van a madurar.Y es por esto, y, obviamente, por un sin fin de cosas más, que yo he de madurar. Abrir bien los ojos y dejar de lado todo aquello malo, todo lo que no forma parte de mi vida, aquello que no me complementa. No puedo seguir esperando a que suene el teléfono, a que me envíen un mensaje. 

Me he equivocado tantas veces y he visto el mismo comportamiento demasiadas veces. He visto como muchas personas me decían que eran "niñas malcriadas", que eran personas interesadas. Pero yo en un afán de demostrar que esto no era así me acerqué a ellas. En ese momento tuve un comportamiento inmaduro, me comporté como una niña pequeña porque quería ser YO la que tuviera razón. 

Por eso ahora veo las cosas des de otro punto de vista. Y veo que no puedo rebajarme a ese nivel. No puedo hacer las cosas que ellas han hecho. Porque yo no soy así. Porque yo no me veo amenazada...

Yo no doy puñaladas traperas como ellas, ni tengo esos comportamientos. Yo he madurado. ¿Ellas? Con su comportamiento infantil no lo creo.

  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...