viernes, 7 de noviembre de 2014

Heart wants.

The bed's getting cold and you're not here
The future that we hold is so unclear
But I'm not alive until you call
And I'll bet the odds against it all
Save your advice 'cause I won't hear
You might be right but I don't care
There's a million reasons why I should give you up
But the heart wants what it wants

(The heart wants what it wants, Selena Gomez)


Durante mucho tiempo me he imaginado a tu lado. Sí, he creído que creceríamos juntos como personas, como amigos. Creí que en cada paso que yo diera  te tendría a mi lado, apoyándome, sonriéndome. Pero, ya no estás. 

No eres capaz de comprender la situación, ni lo que pasa. No eres capaz de entender que tú no eres el único con problemas, ni el único que vive momentos de completo estrés, de completa locura (y no de la buena). No eres el único. 

Intento estar a tu lado, aunque ahora sea más difícil. Quiero sostenerte, decirte que todo va a pasar, pero, cada vez que intento estar a tu lado, tú te distancias, tu me empujas, me evitas. Quiero sostenerte, aunque no pueda físicamente, hay mil maneras de estar a tu lado. Siempre he estado ahí, no tengo razones para fallarte ¿por qué hacerlo ahora?

Mis días no son los mismos sin tus llamadas, sin tus mensajes. Nada es lo mismo si no te tengo a mi lado. Pero, hay momentos en los que no estás. Hay momentos en los que desapareces, en los que no te puedo encontrar, en los que veo que no puedo contar contigo. 

Me escribes, aunque ya no es como antes. Ahora te distancias, escribes tan solo para reprocharme. Vuelvo a la misma historia de siempre; es como si yo tuviera que pensar en ti cada vez que voy a dar un paso, cada vez que voy a hacer algo. ¿Por qué? 

Todo lo que hago, si no es contigo, lo ves mal. Quieres intentar aconsejarme, pero, yo ya me he cansado de escucharte, de ir tras ti, de dar mi brazo a torcer. Eso es lo único que hago... Doy mi brazo a torcer con todo el mundo. 

¿Es que acaso tengo un cartel  luminoso en la espalda que diga "presa fácil"? Hay veces que no te das cuenta de lo duras que tus palabras pueden ser, de como pueden doler. Aunque claro, como siempre, acabo como la estúpida de turno a la que herir, con la que jugar. ¡Qué más da! Todos nos llevamos varapalos en esta vida ¿no?

Y llega un momento en el que me pregunto ¿es normal que ya no me apetezca hablar con esta persona? ¿Qué ha cambiado para que yo no quiera saber nada de esa persona en la cual confiaba? ¿Soy yo? 

Debería tirar la toalla contigo. Acabar con esto, aunque te duela. Sin embargo, soy tan estúpida y te quiero demasiado como para dejarte ir, como para ignorarte, como para herirte. Porque yo nunca seré como tú, nunca me comportaré como tú. 

El corazón quiere lo que quiere, y yo te quiero en él. Quiero que formes parte de mi vida, quiero tenerte en mi vida. Y aun así, tú me lo pones tan difícil. Ya no sé como reaccionar, ya no sé que hacer. 

Estoy tan cansada, y eso tú no lo ves. Hay más personas a las que quiero en mi vida y las trato a todas por igual. Tú haces lo mismo con los demás ¿por qué yo he de ser diferente? No lo entiendo, y tú nunca me entiendes a mí. Intento formar una frase coherente, intento decir algo y nada sale. No puedo hablar, porque todo puede ser malinterpretado, mal visto. Y yo siempre salgo herida.  

¿Sabes qué quiere mi corazón? Que todo vuelva a la normalidad. 

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