domingo, 29 de enero de 2017

Cuando nadie me ve...

Cuando nadie me ve 
puedo ser o no ser 
Cuando nadie me ve 
pongo el mundo del revés 
Cuando nadie me ve 
no me limita la piel 
Cuando nadie me ve 
puedo ser o no ser 
Cuando nadie me ve...
(Cuando nadie me ve, Alejandro Sanz)

Cuando nadie me ve y el telón se baja, puedo vivir mil y una historias diferentes. Cuando las luces se apagan, cuando te das media vuelta y ya ni siquiera distingues mi perfil, ahí decido ser yo. Cuando nadie me ve, río, lloro, amo, vivo, disfruto. 

Cuando nadie me ve no me limito a sonreír. Se cae toda apariencia fingida, las mentiras guardadas. Cuando no nos ven, cuando nadie nos vigila es cuando decidimos ser nosotros mismos. 

Cuando no me ves, cuando no estás a mi lado, escondo mil locuras, no las comparto con nadie. Soy de las que se encierran en su mundo, de las que se pasarían horas escuchando música, creando historias. Vivir un mundo lleno de fantasías. 

Escribo historias, soy quien nunca fui, quien quiero ser algún día. Hago aquello que deseo, que me apasiona, no me amedrento. Me paro frente al espejo, me miro, y me siento valiente, fuerte, con ganas de continuar... pero nadie me ve, nadie lo sabe. 

Soy capaz de guardar mil secretos, no compartir absolutamente nada. Entregar un pedacito de mí, una pequeña parte que jamás recuperaré. Doy demasiado, entrego partes de mí a personas que no se lo merecen, que no deberían tener nada mío. Y, cuando nadie me ve, pierdo otra pieza, otra persona. 

Doy demasiado y son pocos los que algo devuelven. Confío en quien no debería, en personas que perderé rápidamente por el camino. Yo no veo esto, no quiero verlo. Quiero creer que tienen un gran corazón, que se muestran tal y como son, que no son actores de una obra teatral, que no fingen. 

Cuando no te ven, cuando no cuentan contigo, las decepciones se hacen mayores. Pensar en aquellos por los que tanto diste, a los que defendías siempre, a capa y espada sin saber que mentían, jugaban contigo. 

Dicen que el amor es ciego, que no te deja ver las cosas con claridad, ni ser objetivo. Estaban en lo cierto, no veíamos la realidad, tan nos percatábamos de aquellos que nos interesaba, de aquello que nos haría feliz. 

Así que, cuando nadie me ve, lloro, desconfío, me decepciono. Tantos secretos escondidos, nadie a quien contarle la verdad. Sentarte frente a ellos, pensar que es un duelo, una batalla, y decidir que es hora de luchar por ti misma. 

Cuando nadie me ve, decido ser egoísta, pensar en mis objetivos, en mis sueños. Me olvido de todo aquél que quise, de todo aquél que me hizo daño, que intentó pisotearme, tirarme por los suelos. Fueron muchos y de pocos guardo recuerdo. 

Si no me ven, si no saben que existo, jamás sabrán lo que siento... Personas a las que quiero, amo, deseo. No sabrán que una parte de mí los quiere proteger, no los quiere olvidar. 

Cuando nadie me ve, cuando los últimos rayos de sol se esconden, cuando la luna es la única que puede iluminarnos, me protejo de los que me hicieron daño, me dedico a cerrar los ojos, a prepararme para un nuevo día, a fingir. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguimos viviendo de sueños.

Ojalá poder hablar sin tapujos, ser un maldito libre abierto, no dejar que te coma por dentro, que en ti haya un malestar generalizado por a...